Tener una boda es un momento trascendental en la vida de una persona, es un evento el cual tenemos culturalmente aprendido desde pequeños.
La mayoría de nosotros es invitado al menos a unas 10 bodas a lo largo de nuestra vida previo a considerar la propia, y aun después de esto generalmente no dimensionamos los costos que se generan de toda la planeación y arreglos en el momento de contraer matrimonio.
“Una boda es una meta soñada por muchas parejas.”
Recientemente fui a una boda fuera de la Ciudad de México, un buen respiro para salir del tráfico y contaminación de la capital. Mientras conducía por la carretera con el resto de invitados, no pudimos evitar pensar en los múltiples detalles que se deben considerar al momento de contraer nupcias: elegir el lugar (ciudad, iglesia y salón), que fecha-temporada se escogerá, el número de invitados, cuantos platillos se servirán, que bebidas se tomarán, que adornos se incluirán (florales y de decoración) y por último adonde terminará la luna de miel…
Siéntanse libres de añadir otros gastos a la lista, pero de inicio únicamente para rentar un salón promedio en la ciudad estamos hablando de $50K-80K, esto sin sumar unos cuantos arreglos adicionales y el alcohol que se servirá. ¿Lo tenemos disponible para el próximo evento de Diciembre?
Una boda es una meta soñada por muchas parejas y como toda meta es necesario diseñar el camino y la estrategia para poder cumplir con las expectativas, de lo contrario únicamente vamos viendo con desilusión como nuestro pastel de 5 pisos termina siendo de 1 y debemos dejar de invitar a ciertos familiares por falta de recursos para la comida.
Para que esto no nos pase, existen distintas formas de ahorrar y anticiparnos a este tipo de celebraciones, lo mejor de todo es que en el caso particular de una boda no es necesario que lo hagamos solos ya que nuestra pareja nos puede apoyar para que alcancemos el sueño juntos y de esta forma también comenzar a formar hábitos financieros como pareja.
Aunque muchas veces pareciera incómodo hablar del tema, es importante siempre saber la expectativa de la pareja, así como sus hábitos y situación financiera ya que de esto dependerán los recursos que tengamos disponibles para ahorrar en conjunto. Dependiendo en cuanto tiempo se deseé realizar este compromiso, existen distintos fondos de inversión de mediano y largo plazo que pueden ser una buena opción para depositar el dinero porque además de que lograremos ahorrar constantemente para nuestra meta, nos podrá generar rendimientos adicionales que podremos utilizar por si el gasto del evento se nos sale de las manos.